Vida útil de las baterías de los coches eléctricos

¡Inauguramos el blog!

En este espacio abordaremos temas relacionados con el coche eléctrico, híbridos, enchufables y otras cuestiones interesantes sobre el sector.

Empezaremos con una cuestión importante: la vida útil de las baterías. Este es un tema que inquieta a muchos compradores; y no les falta razón. Las baterías de algunos modelos de los primeros eléctricos producidos en masa hasta el año 2014 o 2015 podían presentar bajadas de rendimiento aceleradas derivando en pérdidas de autonomía o reparaciones costosas. En los vehículos electrificados de nueva generación esta realidad es bien distinta.

Geotab, una empresa canadiense, que se dedica al análisis de datos de vehículos para mejorar la gestión y movilidad de sus flotas, ha recopilado información de los sistemas de almacenamiento de energía de 6.300 coches para comprobar cuál es el verdadero desgaste que padecen las baterías de estos automóviles.

En su investigación, Geotab ha recogido los datos de 21 modelos diferentes y su conclusión ha sido que, las baterías apenas pierden una media de 2,3% de su capacidad cada año. Con estos resultados, los investigadores de Geotab creen que las baterías pueden mantener aproximadamente el 90% de su capacidad inicial tras 6 años y medio de servicio. La mayoría tendrán una vida útil superior a la del propio coche al que proporcionan esa energía.

BMW también ha recopilado datos referentes a las baterías de coches eléctricos y asegura que, ya hoy en día, su vida útil es tan larga que superará, tal y como ha concluido Geotab, a la duración del propio vehículo. Esto permitirá destinar esas baterías a otros usos, una  vez cumplan su función en el transporte o recicladas, para lo cual ya hay numerosas iniciativas en marcha (y de las que hablaremos en otro artículo). Según el jefe de desarrollo de BMW, Andreas Raith, la batería de su modelo i3 superará sin problemas los 15 años de vida útil mejorando las cifras de uso de los motores de combustión. Raith, añade además, que han optado por preservar su conservación desde el diseño para hacer las baterías lo más duraderas posibles. Además, según los datos analizados aseguran que tras estos 15 años, deberían aún mantener el 70% de su capacidad.

Por otra parte, mientras que en los modelos de combustión se produce una reducción del rendimiento del motor, aumento del consumo y de los costes de operación; en el caso del vehículo eléctrico únicamente se limitará a la autonomía ya que el motor eléctrico mantiene prácticamente intactas en el tiempo y kilometraje sus capacidades originales.

Con estos datos, se puede comprobar que las baterías de los eléctricos de nueva generación tienen una durabilidad mucho mayor de lo que se suele pensar.  Si le añadimos que son vehículos mucho más sostenibles debido a la ausencia de emisiones de su motor, ¿por qué no animarse a probar uno?